miércoles, 26 de octubre de 2016

Argentina indígena


La población del actual territorio argentino a la llegada de los españoles a principios del siglo XVI sumaba unas 330.000 personas agrupadas en una veintena de grupos étnicos. Los habitantes del Noroeste, de las Sierras Centrales y de la Mesopotamia practicaban la agricultura, mientras que el resto del territorio estaba ocupado por grupos de cazadores-recolectores. Las culturas más extendidas fueron los diaguitas al Noroeste, los guaraníes, los tupíes, los tobas y los guaycurúes en el Noreste, los pampas en el centro y los tehuelches, mapuches y onas en el Sur.
Tastil en el norte fue la ciudad precolombina más grande en el actual territorio argentino, llegando a tener más de 30.000 habitantes
indígenas Onas

Los agricultores incipientes integraban distintas tribus que habitaban a orillas del Río Paraná. Practican sencillos cultivos y también eran cazadores y pescadores. Eran pueblos sedentarios. Entre los pueblos que practicaban una agricultura más sencilla podemos nombrar a los guaraníes, los chanaes timbúes y los charrúas.
Los grupos dedicados a la caza, a la pesca y a la recolección de frutos aprovechaban los recursos del medio. Eran nómadas: sus viviendas eran transportables, pues debían desplazarse constantemente en busca de sus presas. Estos grupos de cazadores recolectores habitaron en las planicies de la Argentina (los querandíes), el Chaco (los guaycurúes) y en la Patagonia (los tehuelches, onas y yámanas).


Distribución indígena en Argentina durante la colonización española
(a)= agricultores superiores
(b)= agricultores incipientes
(c)= cazadores- recolectores

1- Atacamas (a)
2- Omaguacas (a)
3- Diaguitas (a)
4- Lule-Vilelas (c)
5- Tonocotes (b)
6- Sanavirones (b)
7- Comechingones
8- Huarpes (a)
9- Chiriguanos (a)
10- Matacos (a)
11- Guaicurúes(c)
12- Guaraníes (b)
13- Charrúas (c)
14- Querandíes (c)
15- Tehuelches (c)
16- Selk’nam (c)
17- Pehuenches(c)
18- Yámanas (c)

Culturas indígenas antes de la conquista española

Mesopotamia

En la Mesopotamia se habían asentado, también recientemente, los guaraníes, provenientes de la Amazonia y parte del grupo cultural conocido como tupí-guaraní.
Los  guaraníes se establecieron en territorio argentino entre fines del siglo XV y comienzos del XVI, avanzando desde el noreste principalmente por los ríos y otros cursos de agua. Se subdividieron en distintos grupos dependiendo de la zona donde habitaban, como los en las islas del Delta del Paraná, los del Carcarañá, de Santa Ana ,en la región mesopotámica y en Salta y Jujuy
Vivían en aldeas que constituían verdaderas unidades tribales por ser entidades económicas independientes. Cada aldea guaraní estaba dirigida por un jefe político llamado mburuvichá y un jefe religioso llamado payé. Su organización social estaba encabezada por un cacique hereditario.
Eran diestros navegantes de canoas, conocedores cazadores de la selva, recolectores, pescadores y practicaban la agricultura.
En el siglo XV, la sociedad guaraní pasaba por un período de cambio. Comenzaron a aparecer instituciones unificadoras que, probablemente a la larga hubieran llevado al surgimiento de un estado. Los karaí, profetas aceptados por todas las aldeas, que se enfrentaban entre sí en un permanente ciclo de búsqueda de la Tierra sin Mal. Los karaí recorrían las aldeas predicando un mensaje de advenimiento de importantes cambios, y no pertenecían a ninguna tekua en particular sino que eran panguaraníes.
Con la posterior  invasión europea en la zona, llegan los jesuitas que en cierto sentido, vienen a competir directamente con los karaí. Aunque extranjeros, traen un mensaje unificador y sobre todo los guaraníes que aceptaban la invasión pasaban a estar cubiertos por las leyes de España.

Gran Chaco

En la zona norte del Gran Chaco se instalaron diversas culturas o familias lingüísticas: Tobas, pilagas, mocovies, abipones, wichí, tupí-guaraní, arahuac y lule-vilela. Se distinguieron por sus habilidades guerreras y a la llegada de los españoles incorporaron el caballo y resistieron la colonización. Los españoles les llamaban «frentones» (especialmente a los tobas) porque se depilaban la frente como marca de guerra, y la palabra «toba» tiene más que ver con la cara grande, en forma despectiva, pero esto era debido a lo ya mencionado, que parecían frentones). Ocupaban el territorio oriental y sur de la región chaqueña. La cultura de los wichís («matacos»), chulupíes y chorotes; se ubicaron en la zona occidental del Chaco. Pertenecientes a la cultura tupí-guaraní son los chiriguanos, que se instalaron en el oeste de la región. En la misma zona se asentaron los chané, de la cultura Arahuac. Al noroeste del Chaco se ubicaron los vilelas (lule-vilela).


La Pampa y Patagonia

En la zona pampeana y la Patagonia se destacaron los het, los tehuelches y los mapuches -estos últimos controlaron el norte de la Patagonia hasta fines del siglo XIX-. Los estudios antropológicos de los grupos cazadores y recolectores, tradicionalmente considerados más simples que los pueblos agricultores, han puesto de manifiesto la complejidad que alcanzaron culturas de un alto grado de simbolismo, como los sélknam, aush, yámanas, kawésqar, de Tierra del Fuego.




martes, 25 de octubre de 2016

Conquista y colonia (1492-1776)


En 1516 el navegante Juan Díaz de Solís visitó lo que actualmente se conoce como Argentina, navegando el actual Río de la Plata, al que denominó Mar Dulce, llegando hasta la isla Martín García y navegando un breve trecho del Río Uruguay, donde murió en un combate con los charrúas. Es por tanto el primer extra-américano del que tengamos constancia segura en pisar suelo de la actual Argentina

En 1519 y 1520 Hernando de Magallanes, en el primer y famoso viaje de circunvalación del mundo, recorrió toda la costa de la actual Argentina, hasta el estrecho que lleva su nombre al que llegó el 21 de octubre de 1520.

En 1525 fray García Jofre de Loaísa dirige una expedición que recorre la Patagonia e incluso se establecen brevemente en el puerto Santa Cruz para reparar dos naves.

En 1526 Sebastián Gaboto (italiano), zarpó de España para dirigirse a las islas Molucas en Oceanía, con el objeto de repetir el viaje de Magallanes y Elcano. 
En abril de 1527 Gaboto ingresó al Río de la Plata y el 6 de abril estableció una pequeña fortaleza llamada San Salvador, cerca de la actual ciudad de Carmelo (Uruguay). Allí encuentra a Francisco del Puerto, sobreviviente del grupo de Solís, quien vivía con los charrúas y le confirma la existencia de un Imperio de Plata, aguas arriba. El 9 de junio de 1527, Gaboto ordenó establecer un fuerte al que llamó Sancti Spíritus, primer asentamiento europeo en el actual territorio argentino, cerca de la actual ciudad de Coronda, en la boca del Río Carcarañá, en la actual provincia de Santa Fe. Desde el fuerte Gaboto mandó tres expediciones; de dos de ellas nada se supo, pero la tercera, comandada por Francisco César, llegó a una sierras (posiblemente Córdoba) donde encontraron un pueblo que «cuidaban carneros de la tierra de cuya lana hacían ropas bien tejidas», posiblemente diaguitas. Recogieron también piezas de plata provenientes del norte.

En 1531 Portugal envió una gran expedición al mando de Martín Alfonso de Souza para tomar posesión del Río de la Plata y expulsar a los españoles. Llegó hasta la Isla Martín García, que rebautizó Santa Ana. Se internó por el Río Uruguay y se enteró que los españoles del fuerte San Salvador habían sido derrotados. Decidió entonces retirarse al Cabo de Santa María (donde actualmente se encuentra La Paloma, Uruguay). Allí tomó medidas astronómicas y llegó a la conclusión que estaba del lado español de la Línea de Tordesillas, por lo que volvió a Portugal sin realizar fundación alguna.

En 1536 Don Pedro de Mendoza fundó Santa María de los Buenos Ayres, la primera ciudad argentina. La miseria y el hambre doblegaron a Mendoza y su gente y Buenos Aires quedó despoblada hasta su segunda fundación por Juan de Garay en 1580. Las ciudades argentinas fueron fundadas por conquistadores que provenían de distintas zonas de América. La corriente pobladora del este, llegada desde España, tomó como base de operaciones la ciudad de Asunción y fundó las ciudades litorales. La que vino desde el Perú ocupó el Tucumán, como se llamaba entonces a todo el Noroeste argentino. Las ciudades cuyanas fueron fundadas por la corriente proveniente de Chile.



Organización social
La sociedad colonial presentó aspectos diferenciables de acuerdo a la región. En el interior, se determinó una sociedad de castas fuertemente diferenciadas, los hacendados blancos eran la cúspide de ésta y el poder en las ciudades, eran educados y refinados, mientras que el campesinado mestizo estaba en condiciones cuasi serviles. La población negra era muy escasa, reducida casi en su totalidad al servicio doméstico, salvo en ciudades algo más mercantiles como Córdoba.

En cambio, en el Litoral argentino, y especialmente en Buenos Aires, los estancieros, en ese entonces, todavía no representaban la cúspide de la sociedad, sino que eran productores medianos, de carácter rudo debido a la actividad ganadera y que residían la mayor parte del tiempo en la campaña. La élite porteña (es decir los pocos individuos adinerados que residían en la entonces muy pequeña "ciudad" de Buenos Aires, casi en el puerto de esa ciudad) en esos tiempos estaba representada por los comerciantes muchos de ellos dedicados a todo tipo de contrabando, especialmente a lo que irónicamente pasó a ser llamado "contrabando ejemplar" e incluso al tráfico de esclavos capturados en África muchas veces realizado con barcos portugueses e ingleses aunque los dueños "capitalistas" es decir los que "invertían" en el "rentable negocio" de la esclavitud, es decir los dueños de las "empresas" esclavistas pudieran ser de otros orígenes.

Sistema de castas

En el aspecto social, la colonia fue organizada sobre un sistema de castas basado en las nociones de raza e híbrido y de la "pureza de la sangre". Los españoles consideraban la existencia de tres "razas": la "española" o "blanca", la "india" y la "negra". Del mestizaje entre esas tres razas surgían a su vez los siguientes "híbridos":

Primer grado:
1-de blanco con negro: mulato.
2-de blanco con indio: mestizo
3-de negro con indio: zambo

Los descendientes de padres mezclados de, Español y Negro permanecen manchados por generaciones incontables y no pueden escapar de su herencia, o perder su calidad primitiva de Mulatos.Pasa lo mismo con la mezcla de sangre Negra con la India. El Indio puro es de sangre pura, tanto como el Español y los dos no están en conflicto como están los dos con el Negro. Aunque las mezclas de sangre Española e India no pueden escapar de su condición, permanecen incontaminadas.

Segundo grado:
1-de negro con mulato: zambo, grifo o cabro.
2-de negro con zambo: lobo.
3-de blanco con mulato: tercerón o morisco.
4-de blanco con mestizo: cuatralbo, castizo.
5-de indio con zambo: zambaigo.
6-de indio con mestizo: tresalbo.
7-de indio con mulato: mulato prieto.
8-de negro con zambo: zambo prieto.

Tercer grado:
1-de blanco con tercerón: cuarterón, albino

En la cúspide del sistema de castas se ubicaban los españoles peninsulares, nacidos en España y los españoles americanos o criollos, nacidos en América y registrados como descendientes legítimos de padre y madre española que gozaban de exactamente los mismos derechos y obligaciones que los "peninsulares". Aunque en la colonia el mestizaje entre las diferentes etnias fue un fenómeno generalizado, el sistema legal español castigaba "la mezcla de sangres" que causaba su impureza o "manchado". Indios, mestizos, mulatos y negros resultaron postergados, ocupando los negros nacidos en África el lugar más bajo.

España había impuesto el cristianismo y el idioma castellano en gran parte del actual territorio argentino. Por otra parte, en la América española regían las costumbres y modas españolas, así como las indo americanas, y en menor medida las francesas y africanas.

Economía

Durante la era colonial, y hasta el Reglamento de Comercio Libre de 1778, la economía del Tucumán y Cuyo estaba dedicada a la producción de insumos y bienes de consumo para los mercados del Alto y Bajo Perú, Buenos Aires y Paraguay. Así, vinos y aguardiente de Cuyo, mulas de Córdoba, tejidos de Salta y Tucumán, carretas de Córdoba y Tucumán, etc., se producían bajo el amparo del proteccionismo español. En el siglo XVIII, bajo los Borbones, la actitud comenzó a variar, buscando proteger los intereses comerciales de los productores peninsulares en los mercados cautivos de las colonias.
Los principales productos comercializados por las misiones jesuiticas eran la yerba mate, el tabaco, el cuero y las fibras textiles. .

Influencia cultural 

No sólo a trabajar, rezar y pelear les enseñaron los jesuitas, sino también música y otras artes (de las que aún se pueden admirar se destacan las "barrocas" arquitecturas exornadas con relieves barrocos resaltados en las piedras sillares o tallados en los rojos ladrillos de tipo romano. Es así que, luego de la expulsión de los jesuitas, muchos guaraníes se trasladaron a las ciudades coloniales, como Corrientes, Asunción o Buenos Aires, donde se destacaron como compositores y maestros de música, plateros y pintores.



lunes, 24 de octubre de 2016

Virreinato (1776-1810)


En el proceso de la conquista que siguió al descubrimiento de América, la Corona de España dividió los territorios de sus colonias en unidades político-administrativas denominadas virreinatos. Este sistema organizativo permitió a la metrópoli administrar las vastas extensiones de los territorios americanos.
De esta manera, la superficie de la actual Argentina formó parte, durante la etapa colonial, del Virreinato del Perú y, a partir del año 1776, del Virreinato del Río de la Plata. En esa fecha, la Corona española modificó la composición de los virreinatos con el objetivo de lograr una mejor organización administrativa, y un mayor control interno y externo sobre sus dominios. Asimismo, introdujo diversos cambios en la organización política del Virreinato del Río de la Plata, que fue subdividido en ocho intendencias, las que, a su vez, estaban compuestas por unidades administrativas llamadas partidos. De esta manera, se buscaba neutralizar la amenaza que representaba el Imperio Luso portugués, cuyas colonias se localizaban en el actual Brasil, y que aspiraba anexar los territorios de la región del Río de la Plata.
La valoración que los españoles realizaron de estos espacios no fue igual en todas las regiones, ya que su interés estaba centrado en los recursos naturales que podían explotarse mediante las actividades mineras y ganaderas. En el transcurso de las exploraciones, los españoles fundaron las primeras ciudades de nuestro país, muchas de las cuales aún conservan sus nombres originarios. En forma conjunta, comenzaron a trazarse en estos territorios las primeras rutas y caminos.
Este proceso de colonización urbana, posterior a la conquista, impregnó el territorio de la actual Argentina con los variados rasgos de la cultura hispana, los que han permanecido en las obras arquitectónicas construidas durante la etapa colonial; por ejemplo, las iglesias, los cabildos y las plazas centrales.


Vista de Buenos Aires en 1790. Grabado del libro Viaje por la América Meridional de Félix de Azara



domingo, 23 de octubre de 2016

Independencia (1810-1820)


Las invasiones inglesas demostraron que España estaba seriamente debilitada y que no podía ni abastecer correctamente ni defender a sus colonias. La ocupación francesa de España por Napoleón, la captura de del Rey Carlos IV y su hijo Fernando VII y la caída de la Junta Central de Sevilla decidieron a los criollos a actuar. El 25 de mayo de 1810 se formó la Primera Junta de gobierno presidida por Cornelio Saavedra, que puso fin al período virreinal. Mariano Moreno, secretario de la Junta, llevó adelante una política revolucionaria tendiente a fomentar el libre comercio y a sentar las bases para una futura independencia.
Entre 1810 y 1820 se vive un clima de gran inestabilidad política. Se suceden los gobiernos (Primera Junta (1810), Junta Grande (1811), Triunviratos (1811-1814) y el Directorio (1814-1820) que no pueden consolidar su poder y deben hacer frente a la guerra contra España. En esta lucha se destacaron Manuel Belgrano, José de San Martín, llegado al país en 1812, y Martín Miguel de Güemes. Las campañas sanmartinianas terminaron, tras liberar a Chile, con el centro del poder español de Lima. El 9 de julio de 1816 un congreso de diputados de las Provincias Unidas proclamó la independencia y en 1819 dictó una constitución centralista que despertó el enojo de las provincias, celosas de su autonomía.

sábado, 22 de octubre de 2016

Formación del Estado Argentino y creación de la Nación Argentina

En 1825 la ley fundamental cambió el nombre de Provincias Unidas de América del Sur por el de Provincias Unidas del Río de la Plata; y por fin, la constitución de 1826 convirtió a las provincias unidas en la Nación Argentina. En ese mismo momento se producía el desmembramiento de los territorios que habían sido parte del Virreinato del Río de la Plata, este proceso se hizo evidente con la sublevación de la Banda Oriental y su posterior entrega a Brasil.
El federalismo logró en parte sus objetivos con la constitución de 1853 que, si bien instauró este sistema, no pudo terminar con los enfrentamientos entre Buenos Aires y las provincias. Lo cierto es que el poder de Buenos Aires como ciudad puerto y llave maestra de las exportaciones agropecuarias, base de la economía argentina, condicionaría la historia del país.


Presencia y fin del Estado argentino en las Islas Malvinas
La Argentina sostiene que con su independencia, heredó los derechos de España en virtud de la doctrina del "uti possidetis iuris" (‘como poseéis de acuerdo al derecho, así poseeréis’)y de la de «sucesión de estados», por lo que ejerció un «dominio eminente» a partir de 1810. Al reconocer España la independencia argentina en 1859, cedió explícita y retroactivamente al 25 de mayo de 1810 sus derechos sobre el territorio argentino, que incluirían a las Malvinas.

El 6 de noviembre de 1820 el coronel estadounidense al servicio de las Provincias Unidas del Río de la Plata, David Jewett, al comando de la fragata Heroína realizó en Puerto Soledad la toma de posesión de las islas Malvinas en nombre del Gobierno de esas Provincias Unidas, que era el nombre de la Argentina usado en aquel entonces.
Jewett hizo izar por primera vez la bandera de Argentina en el territorio y repartió comunicaciones al respecto a los cazadores de lobos marinos y de ballenas, que de varias nacionalidades estaban allí presentes.
La noticia tuvo difusión en la prensa de Europa. Las islas quedaron bajo pacífica posesión de las Provincias Unidas hasta la ocupación británica de 1833.

El 2 de febrero de 1825 el Reino Unido firmó un tratado de amistad, comercio y navegación mediante el cual reconoció la independencia de las Provincias Unidas y, naturalmente, la existencia de un ámbito territorial propio de ella, incluyendo las Malvinas, que habían tomado posesión en 1820, y ejercido otros actos de soberanía incluyendo el nombramiento y la instalación de autoridades. Además se debe sumar que en el tratado el Reino Unido no expresó pretención alguna a las islas y que el tratado implicó la admisión de las consecuencias jurídicas de tal reconocimiento

La presencia del Estado argentino en las Islas Malvinas terminó 3 de enero de 1833 a través de una operación militar del Reino Unido de Gran Bretaña e Irlanda que tomó el control de las islas luego de que el 20 de diciembre de 1832 la corbeta estadounidense USS Lexington destruyera las defensas militares del asentamiento argentino de Puerto Soledad, en la isla homónima. A pesar de estar en relaciones de paz con la Confederación Argentina, el Reino Unido, con dos buques de guerra desalojaron a la guarnición argentina de 26 soldados, quienes se marcharon dos días después. Desde entonces, las islas han estado bajo dominio británico, excepto durante el breve período de la Guerra de Malvinas en 1982.

viernes, 21 de octubre de 2016

ECONOMÍA


Argentina colonial o primer período económico

El primer hito económico fue el descubrimiento del Rio de la Plata por Juan Días de Solis , quien inauguraba la época de la conquistas y colonización del actual territorio argentino (1516-1810).este descubrimiento también fue motivado por lo económico y lucrativo de encontrar el famoso lugar de "El dorado", donde se decía que había más oro que en ninguna parte del mundo. Este período estaba comprendido por tres subperíodos: Temprano (1516-1650), Medio (1650-1776) y uno Tardío (ó de retirada) (1776-1810). Cada uno caracterizado por los cambios en la configuración de los circuitos regionales, el centro de atención económica y la organización del comercio .
  • Subperíodo temprano (1516-1650)
  • Subperíodo medio (1650 - 1776)
  • Período tardío o de retirada (1776 - 1810)
Cada uno caracterizado por los cambios en la configuración de los circuitos regionales, el centro de atención económica y la organización del comercio (sobretodo ultramarino con la corona europea y las demás monarquías del continente).

Después de que Argentina se convirtió en una nación independiente el año 1810, el control del comercio por un pequeño grupos de peninsulares llegó a su fin. 24 La Primera Junta, el primer gobierno patrio establecido después de la Revolución de Mayo de 1810, osciló entre políticas aperturistas y proteccionistas. El Primer Triunvirato (1811-1812), influenciado por Bernardino Rivadavia, promovió un comercio sin restricciones con Gran Bretaña. 25 El Segundo Triunvirato (1812-1814) y José Artigas (quien controlaba la Liga Federal durante el período de 1815-1820) buscaba restaurar la política proteccionista inicial, mas el Director Supremo restauró el comercio libre una vez más. 26 Por lo tanto, la economía del Río de la Plata se convirtió en una de las economías más abiertas del mundo.

Posteriormente entre 1812 y 1816, se desarrollaron divisiones entre una facción centralista (los unitarios) apoyada en el poder de Buenos Aires, y una facción federal en las provincias, que eventualmente abrirían paso a una serie de guerras civiles que terminarían en la conquista de Buenos Aires por los caudillos federalistas en la Batalla de Cepeda (1820).

Cada provincia emitía su propio dinero, que tenía un diferente valor de una provincia a otra; inclusive el valor variaba entre ciudades de la misma provincia. 

Las actividades asociadas con un centro de exportación dinámica disfrutaron de cierto grado de prosperidad, como ocurrió en Tucumán, donde se manufacturaba ropa y en Córdoba y en Litoral, donde se practicaba la ganadería con motivo de proveer a las minas del norte de Perú.

jueves, 20 de octubre de 2016

El Estado Liberal-Oligárquico


Una de las características de este  estado que se configuró a partir de la segunda mitad del siglo XIX, se constituyó con la fuerza de un gobierno central, que se impuso ganando el control del espacio social y territorial. esto  no hubiera sido posible sin el concurso de una fuerza militar. Este dominio del territorio contribuyó la formación de un mercado nacional y  que unificó el espacio interior para integrarlo en la economía internacional. El ingreso de capitales extranjeros, se llevó a cabo a través del modelo agro exportador. Nuestro país en el siglo XIX se apoyaba en una clara división internacional del trabajo por la cual Gran Bretaña era la proveedora de productos manufacturados mientras que Argentina era la proveedora de materias primas. el estado argentino promovió la plena inserción al mercado mundial.
 La conformación del estado nación en la Argentina tuvo, características particulares en tanto coincidió con la incorporación de una gran masa inmigratoria proveniente de Europa occidental. El proceso de organización nacional terminó a partir de los ’60 a través del ejército nacional, llevando a cabo obras de infraestructura y comunicaciones y extendiendo las relaciones capitalistas a todo el territorio nacional. El elemento productivo central de este modelo de acumulación agro exportador fue la estancia, que simboliza el sistema de autoridad económico y político cultural de la clase dominante. Se constituyó un régimen político censitario, centralizado en la presidencia bajo la forma del “unicato”, de control de las provincias.
 El gobierno y los asuntos nacionales se estructuraron  de tal forma que servían y satisfacían a oligarquía. El sistema político se caracterizó por la constitución de un régimen de partidos de notables, con fuertes restricciones en la participación, en tanto se restringía el acceso a la mayoría a las decisiones. Se trató de un modelo de amplias libertades civiles y restringidas políticas. El Estado adoptó un rol modernizador y portador de un progreso identificado con el mundo cultural europeo occidental. Se promovió la integración social mediante el amplio acceso al sistema educativo. La constitución de la identidad nacional fue desarrollada a través de la educación pública. El período que corresponde a este modelo de relaciones estado - sociedad fue destacado, desde una perspectiva modernizadora, como una etapa de crecimiento y ascenso en el contexto mundial y, desde una perspectiva democrática, ha sido criticado por su carácter elitista y autoritario.
En 1916  Este estado liberal oligárquico cambia de régimen político donde se produciría el pasaje del estado liberal oligárquico al democrático liberal, momento en el cual de la democracia restringida se pasaría a la ampliada, lo que beneficia la democracia y las libertades políticas a partir de la irrupción del radicalismo Irigoyenista y a la incorporación de los sectores medios con su exigencia de participación en el sistema. El Estado , se ubica como armonizador de los diferentes interese en juego. No obstante no hubo ruptura con la clase dominante en tanto había consenso sobre la forma de entender el progreso económico. El modelo de acumulación agro exportador continuó en tanto se aunaba el consenso sobre los beneficios de ese tipo de división internacional del trabajo. Luego, el impacto de la crisis del ’30, el golpe militar de ese mismo año, y la misma conflictividad presente en el partido gobernante, la declinación del comercio internacional y la reducción nacional de la capacidad de compra contribuirán a la declinación del estado liberal y el surgimiento de una mayor intervención del estado en la economía.